Cuando se trata de dar obsequios y detalles que expresen sentimientos como el amor y la amistad en fechas especiales, hay personas que prefieren optar por el arreglo convencional de flores (el cual resulta, sin duda, ser un excelente regalo), sin embargo, ¿qué tal si ofrecen un arreglo que además de ser llamativo y bello en cuanto a apariencia se refiere, también sea delicioso y disfrutable para el paladar? Tal es el caso de los arreglos frutales, que tal y como lo indica su nombre, se conforman de un singular número de frutas dispuestas sobre una superficie, que regularmente es un canasto; de modo que de la vista nazca el amor y al mismo tiempo seduzcan el gusto de aquella persona especial.
Este tipo de arreglos son cada vez más populares, lo cual no es de extrañar ya que representan una excelente forma de ofrecer detalles en los que están mezclados diversos elementos, como son: flores, alcohol (especialmente vino), dulces, quesos, chocolates, y, por supuesto, los frutos, todo ello ordenado y reunido de forma creativa y armónica sobre la canasta. Con lo dicho anteriormente, se entiende que más que una alternativa de obsequio, son, a la vez, una especie de expresión artística culinaria cuya realización requiere de manos experimentadas como las del personal que opera en Floralia, su mejor opción si de arreglos de flores o frutas se trata.
El obsequiar un cesto o canasto con frutas dispuestas a manera de decoración, resulta una buena manera de consentir a las personas que estimamos, asimismo, es una de las mejores muestras de interés, amor y cariño que pueden darse. En realidad, esta tendencia lleva gestándose desde hace siglos, inclusive, desde la antigüedad misma, pese a que muchos piensan que es un fenómeno reciente impulsado por el mercado que busca ofrecer productos acordes a festividades especiales.
Por ejemplo, en el pasado, compartir u ofrecer frutos consistía en una manera de intimar o entrar en contacto personal con un tercero. No sólo se ofrecían a las personas queridas o amadas, sino, también se entregaban arreglos de frutos sobre diversos recipientes a las deidades de los pueblos, tal y como se dio entre los antiguos griegos y romanos.
Un caso ejemplar en relación a la creación de arreglos de fruta, puede observarse en un cuadro famoso del reconocido pintor italiano Michelangelo Merisi da Caravaggio, a saber, el “Canestra di frutta” (Cesto de fruta en español), además de la tendencia del bodegón o “naturaleza muerta” que se remonta desde la antigüedad misma y se popularizó en el siglo XVII, entre los países de occidente (esta consistía en retratar flores, animales, frutas, recipientes domésticos como canastos, entre otros objetos, tanto naturales, como aquellos elaborados por la mano humana). Hoy en día, han pasado de ser objetos representables a obsequios que se entregan en ciertas fechas u eventos, por ejemplo, bodas, XV años, bautizos, San Valentín, cumpleaños, fechas como el día de la madre, etcétera.
Los arreglos frutales destacan por las variadas formas en que pueden presentarse, las cuales son ilimitadas (aunque cabe señalar que dependen de la capacidad artística del diseñador floral y la calidad de los elementos utilizados). Tales arreglos se combinan, regularmente, con flores con el fin de otorgar a los beneficiarios una selecta variedad de opciones para cualquier tipo de ocasión.
¿Para qué obsequiar un arreglo conformado sólo por flores, cuando se puede dar algo que conjugue tanto el deleite del paladar como el disfrute de los demás sentidos? Eso es en efecto lo que consiguen los arreglos de frutas, repercutir en diversos sentidos para consentirlos, desde el gusto, hasta el olfato y la vista.
Éstos son una invitación a que un ser querido disfrute de un presente colorido, con un diseño artístico y sabores diversos. Como complemento y para generar mayor impacto, suelen acompañarse de diversos objetos no comestibles con diversas texturas y fines decorativos, por ejemplo, productos de fibra natural, canastas hechas de varillas, papel de decoración, virutas, tarjetas de regalo, listones, maderas como palillos de dientes, cristalería, telas, etcétera.
Cierto es que algunas empresas ofrecen diseños de arreglos estándar a través de catálogos predefinidos, sin embargo, existen firmas como Floralia que se encargan de realizar arreglos considerando los intereses y gustos de los clientes o de las personas a quienes se les hará el presente. Tales servicios personalizados resultan ventajosos en gran medida, pues de esta manera se pueden crear obras arregladas y acordes al perfil de cada persona. Inclusive, es posible la implementación de flores y frutas exóticas, entre otros productos específicos, con tal de hacer que el obsequio sea único.
Los elementos de los arreglos frutales son dispuestos sobre envases diversos, que pueden ser de madera, cristal o plástico, asimismo, una vez terminados es posible su entrega a domicilio para evitar que los clientes pierdan tiempo durante el proceso. Para evitar que dichos elementos resulten dañados, son envueltos en diversas láminas como el papel celofán, entre otras fundas que permiten que los arreglos se mantengan frescos y libres de elementos externos. Con lo dicho hasta aquí, se entenderá qué son y qué contienen, así como su importancia en eventos especiales.
Esperamos que esta publicación haya sido amena; si requieren de un arreglo de frutas de calidad, con excelente presentación, a buen precio y mediante servicios personalizados, no duden en visitarnos, nuestra tienda esta ubicada en Dickens No. 52 Col. Polanco Del. Miguel Hidalgo C.P. 11560 CDMX. Tels. (55) 5280 8818 (55) 7021 3547 (55) 69928332 (55) 5280 6229. Manténganse al tanto de nuestras publicaciones, ¡hasta la próxima entrada de este, su blog!